El óxido nitroso (N2O; gas de la risa) se utiliza clínicamente como anestésico seguro (odontología, ambulancia, parto) y es apreciado por su efecto ansiolítico. Desde hace cinco años, el uso recreativo del N2O está aumentando rápidamente, especialmente en la escena del baile y los festivales. En el Reino Unido, el N2O es la segunda droga recreativa más popular después del cannabis. En la mayoría de los países, el óxido nitroso es una droga legal, ampliamente disponible y barata. En el último mes, la prevalencia de consumo entre los clubbers y ravers oscila entre el 40% y casi el 80%. Tras una inhalación, sobre todo de un globo, se induce rápidamente (en 10 s) un efecto eufórico, agradable, alegre, empático y a veces alucinógeno, que desaparece en algunos minutos. El uso recreativo de N2O es generalmente moderado, con la mayoría de los usuarios tomando menos de 10 globos de N2O por episodio y alrededor del 80% de los usuarios teniendo menos de 10 episodios por año. Los efectos secundarios del N2O incluyen mareos transitorios, disociación, desorientación, pérdida de equilibrio, deterioro de la memoria y la cognición, y debilidad en las piernas. En caso de intoxicación pueden producirse accidentes como tropiezos y caídas. Se han registrado algunos accidentes mortales debido a la asfixia (hipoxia). El uso intensivo o sostenido de N2O inactiva la vitamina B12, lo que da lugar a una deficiencia funcional de vitamina B12 y provoca inicialmente entumecimiento de los dedos, que puede progresar hasta convertirse en neuropatía periférica y anemia megaloblástica. El uso de N2O no parece provocar dependencia. Teniendo en cuenta el uso generalmente modesto del N2O y su relativa seguridad, no es necesario tomar medidas legales. Sin embargo, los usuarios (potenciales) deben ser informados sobre el riesgo de efectos neurológicos y hematológicos relacionados con la deficiencia de vitamina B12 asociados a un uso intensivo.