Antecedentes: Los patrones metastásicos únicos citados en la literatura suelen surgir de observaciones clínicas anecdóticas e informes de autopsias. Los autores analizaron los datos clínicos de un gran número de pacientes con adenocarcinoma en estadio distante confirmado histológicamente para evaluar los patrones metastásicos.
Métodos: Los datos del registro de tumores se recogieron entre 1994-1996 en 11 sitios de tumores primarios y 15 sitios metastásicos de 4399 pacientes. Las localizaciones primarias y metastásicas se cruzaron de varias formas para identificar patrones, y los autores desarrollaron algoritmos mediante el uso de análisis de regresión logística multinomial para predecir las localizaciones de los tumores primarios basándose en los patrones metastásicos.
Resultados: Tres tumores primarios tenían localizaciones metastásicas únicas y dominantes: ovario a cavidad abdominal (91%), próstata a hueso (90%) y páncreas a hígado (85%). El hígado fue el lugar de metástasis dominante en los tumores primarios gastrointestinales (71% de los pacientes), mientras que las metástasis óseas y pulmonares se observaron con mayor frecuencia en los tumores primarios no GI (43% y 29%, respectivamente). En un estudio de combinaciones de metástasis hepáticas, de la cavidad abdominal y óseas, el 86% de los tumores primarios de próstata sólo tenían metástasis óseas, el 80% de los tumores primarios de ovario sólo tenían metástasis en la cavidad abdominal y el 74% de los tumores primarios de páncreas sólo tenían metástasis hepáticas. Un solo órgano fue la fuente dominante de metástasis en 7 localizaciones: ganglio linfático axilar de la mama (97%), ganglio linfático intestinal del colon (84%), ganglio linfático torácico del pulmón (66%), cerebro del pulmón (64%), ganglio linfático mediastínico del pulmón (62%), ganglio linfático supraclavicular de la mama (51%) y glándula suprarrenal del pulmón (51%).
Conclusiones: Los algoritmos que desarrollaron los autores lograron una precisión validada cruzada del 64% y una precisión del 64% en un conjunto de pruebas independientes de 1851 pacientes, en comparación con una precisión del 9% cuando se utilizó un clasificador aleatorio.