Cuando los pequeños tienen fiebre (generalmente de 100,4 °F o más), se trata de asegurarse de que estén cómodos. Si están enrojecidos, intranquilos o con dolor, bajarles la fiebre puede ayudarles a descansar y a sentirse mejor.
Para ayudar a bajar la fiebre de un bebé:
- Prueba con un baño de agua tibia. Si le has dado un medicamento a tu bebé, esto puede funcionar bien justo después. Pero deja de hacerlo si notas escalofríos, porque los escalofríos pueden hacer que la temperatura de los bebés aumente.
- Ofrece mucha bebida.
- Vístete con ropa ligera. Y mantenga su habitación ni muy caliente ni muy fría.
Llame a su pediatra si su hijo:
- Tiene menos de 3 meses (12 semanas) y tiene una temperatura de 100.4°F o más
- Tiene más de 3 meses (12 semanas) y tiene una temperatura de más de 100.4°F
- Tiene entre 3 y 24 meses y sigue teniendo una fiebre de 100.4°F o más después de 24 horas
- Tiene una temperatura de más de 100.4°F más cualquiera de estos síntomas:
- Dolor de cabeza intenso
- Dolor de garganta o de oído
- Vómitos o diarrea repetidos
- Cuello rígido
- Salpullido extraño
- Parece muy enfermo, o extremadamente somnoliento o inquieto
- Ha estado en un lugar muy caluroso (como un coche sobrecalentado)
- Tiene problemas subyacentes del sistema inmunitario, antecedentes de convulsiones, o toma esteroides
- Parece empeorar, incluso después de ser tratado
Para ayudar a prevenir la próxima fiebre de su pequeño, asegúrese de que todos en casa se lavan las manos a menudo, y no comparten utensilios, vasos o toallas.