Se revisó la literatura médica de 1968 a 2002 utilizando Medline y las palabras clave «intraarticular» y «osteoartritis» para determinar las diversas terapias intraarticulares utilizadas en el tratamiento de la osteoartritis. Los corticosteroides y el ácido hialurónico son las terapias intraarticulares más utilizadas en la artrosis. Otras sustancias intraarticulares, como la orgoteína, la sinovectomía por radiación, la proloterapia con dextrosa, la silicona, el lavado salino, la inyección salina sin lavado, los agentes analgésicos, los antiinflamatorios no esteroideos, la glucosamina, la somatostatina, el polisulfato de sodio pentosano, la cloroquina, el éster de ácido polisulfúrico mucopolisacárido, la solución de ácido láctico y la tiotepa citostática, han sido investigadas como potencialmente terapéuticas en el tratamiento de las articulaciones artrósicas. A pesar de la falta de pruebas sólidas, convincentes y reproducibles de que alguna de las terapias intraarticulares altere significativamente la progresión de la artrosis, los corticosteroides y el ácido hialurónico se utilizan ampliamente en pacientes en los que han fracasado otras modalidades terapéuticas por falta de eficacia o toxicidad. Como enfoque práctico para una rodilla con derrame, deben considerarse las inyecciones de corticoides, mientras que la presencia de rodillas «secas» sintomáticas puede favorecer el enfoque del ácido hialurónico. La ausencia virtual de efectos secundarios graves, junto con los beneficios percibidos, hacen que estos enfoques sean atractivos.