Algunos pacientes de mieloma múltiple no presentan ningún síntoma. Otros pueden presentar síntomas comunes de la enfermedad, incluyendo:
Problemas con los huesos
- Dolor en los huesos que puede presentarse en cualquier hueso, aunque es más común en la espalda, las caderas y el cráneo.
- Debilidad de los huesos, ya sea en todas partes (osteoporosis) o donde está un plasmocitoma .
- Fracturas (algunas veces los huesos se quiebran solo debido a esfuerzos o lesiones menores).
Recuentos bajos de células sanguíneas
La escasez de glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas es común en el mieloma múltiple, y puede dar lugar a otros síntomas.
- Anemia: Un número reducido de glóbulos rojos que puede causar debilidad, una capacidad reducida para hacer ejercicios, dificultad para respirar y mareos.
- Leucopenia: Muy pocos glóbulos blancos que puede disminuir la resistencia a infecciones, tal como neumonía.
- Trombocitopenia: Es cuando los recuentos de plaquetas en la sangre están bajos, lo que puede causar sangrado profuso incluso con pequeños rasguños, heridas o contusiones.
Niveles elevados de calcio en la sangre
Los niveles elevados de calcio en la sangre (hipercalcemia), puede causar:
- Mucha sed, requiriendo beber muchos líquidos
- Orinar con mucha frecuencia
- Deshidratación
- Problemas renales e incluso insuficiencia renal
- Estreñimiento grave
- Dolor abdominal
- Pérdida del apetito
- Debilidad
- Somnolencia
- Confusión
Si el nivel de calcio es demasiado alto, esto puede causar que usted entre en estado de coma.
Síntomas en el sistema nervioso
Si el mieloma debilita los huesos de la columna vertebral, éstos pueden colapsar y presionar los nervios espinales. A esto se le llama compresión de la médula espinal y puede causar:
- Dolor de espalda repentino e intenso
- Entumeciendo, con más frecuencia en las piernas
- Debilidad muscular, con más frecuencia en las piernas
Usted debe llamar inmediatamente a su médico o acudir a la sala de urgencias, ya que esto requiere atención médica inmediata. Si la compresión de la médula espinal no se trata inmediatamente, existe la posibilidad de parálisis permanente.
Daños en los nervios
Algunas veces, las proteínas anormales producidas por las células del mieloma son tóxicas a los nervios. Este daño puede conducir a debilidad y entumecimiento, y a veces a una sensación de hormigueo. A esto también se le llama neuropatía periférica.
Hiperviscosidad
En algunos pacientes, las grandes cantidades de la proteína secretada por el mieloma pueden hacer que la sangre se ponga «espesa», lo que se conoce como hiperviscosidad. Esto puede retardar el flujo sanguíneo al cerebro y causar:
- Confusión
- Mareos
- Síntomas de accidente cerebrovascular, como debilidad en un lado del cuerpo y habla mal articulada.
Los pacientes que experimentan dichos síntomas deben comunicarse con su médico. Este problema se puede resolver rápidamente al remover la proteína de la sangre mediante un procedimiento llamado plasmaféresis. (Nota: Este problema no se puede tratar con medicamentos conocidos como «anticoagulantes»).
Problemas renales
La proteína del mieloma puede causar daño a los riñones. Al principio, esto no causa ningún síntoma, pero signos de daño renal se podrían notar en un análisis de sangre o de orina. Conforme los riñones comienzan a fallar, éstos pierden su capacidad de eliminar el exceso de sales, líquidos y productos de desecho corporal. Esto puede causar síntomas como:
- Debilidad
- Dificultad para respirar
- Picazón
- Hinchazón de las piernas
Infecciones
Los pacientes con mieloma tienen más probabilidades de padecer infecciones. Cuando alguien con mieloma contrae una infección, puede que responda con lentitud al tratamiento. Esa persona puede estar enferma por mucho tiempo. Una pulmonía es una infección común y grave que se presenta en pacientes de mieloma.
Signos y síntomas de amiloidosis de cadenas ligeras
Los pacientes con amiloidosis (discutido en la ¿Qué es mieloma múltiple? pueden presentar algunos de los mismos problemas que enfrentan los pacientes con mieloma, tal como problemas renales y daño a los nervios. También pueden presentar otros problemas, tales como:
- Problemas cardíacos: El corazón podría agrandarse y volverse más débil. En algunas personas, el corazón se vuelve tan débil que se acumulan líquidos en los pulmones, ocasionando que presenten dificultad para respirar. Los líquidos también se pueden acumular en las piernas y los pies (edema). A esto se le llama insuficiencia cardíaca congestiva.
- Agrandamiento del hígado: es posible que la persona pueda sentir el hígado debajo de las costillas del lado derecho. Cuando estos órganos se vuelven grandes, pueden presionar el estómago, lo que ocasiona que la persona se siente llena después de comer solo una pequeña porción de alimentos.
- Lengua agrandada: cuando el amiloide se acumula en la lengua, el tamaño de ésta puede aumentar, lo que causa problemas al tragar y dificultad para respirar durante el sueño (apnea del sueño).
- Cambios en la piel: cambios en el color o textura, así como tendencia a presentar fácilmente moretones y sangrados de la piel que rodea los ojos («ojos de mapache»).
- Problemas renales
- Síndrome del túnel carpiano: causa entumecimiento y debilidad en las manos.