¿Qué suena mejor que pasar una semana en un zurullo rodante y poco fiable de 2 ruedas quedándose atascado en algunos de los lugares más remotos del mundo?

Nada podría salir bien.

Desde su creación, The Monkey Run ha tomado el mundo. Desde los desiertos de Marruecos hasta las selvas de Perú, sólo eres tú, una bicicleta ridículamente pequeña y un camino raramente transitado.

LA BICICLETA

– Está cerca del suelo, por lo que no tienes mucho que caer.
– Es del tamaño de un patín, por lo que cabrá entre los pequeños huecos del tráfico.
– Es increíblemente ligero, así que cuando inevitablemente se estropea es fácil de llevar.
– Es mecánicamente básico, así que un chimpancé podría arreglarlo.

LA CARRERA

Marruecos – Las enormes dunas de arena del Sáhara están al acecho para hacer que avanzar sea prácticamente imposible. Luego, las montañas del Atlas se alzarán para hacer que tu motor se derrita y tus dedos se congelen.
Rumanía – Atraviesa Transilvania esquivando osos, lobos y vampiros
Perú – ¿Qué mejor lugar para llevar la bicicleta de tu hijo que atravesar los Andes y la selva amazónica?
Mongolia – Podrías hacerlo en un coche de 1 litro, pero ¿por qué lo harías si puedes hacerlo en una bicicleta de juguete?

La carrera de los monos, que llega a un continente cercano.

Dime más

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.