Si alguna vez ha viajado a Londres, la icónica frase «Mind the gap» (Cuidado con el hueco) se ha grabado para siempre en su memoria. La advertencia automatizada se escucha miles de veces cada día en todas las paradas del sistema de metro. El metro de Londres, conocido cariñosamente como «the Tube», es el sistema de transporte rápido más antiguo del mundo. En 1968, más de 100 años después de la inauguración del sistema, se instaló una voz grabada para advertir a los viajeros de que tuvieran cuidado con el espacio entre el andén y el tren, indicando a la gente que «tuviera cuidado con el hueco» cada vez que un tren se detuviera, en todo el sistema. Esta frase de advertencia se ha convertido en sinónimo de la vida londinense y aparece en camisetas, como remate de chistes, en videojuegos y en toda la cultura moderna.
La frase también puede ser una de las armas más poderosas de su arsenal profesional. Es el grito de guerra para explorar lo que falta, lo que no hay y lo que podría haber. Recitada con la misma consistencia rítmica del metro de Londres, es una frase que puede abrir nuevas puertas de oportunidades.
Encontrar el hueco ha sido el origen de cientos de productos y servicios de éxito, ya que los deseos insatisfechos de los consumidores fueron la génesis de algunas de las marcas más famosas del mundo. Cuando hables con los clientes, averigua qué les falta en sus vidas. Las áreas de fricción, descontento y carencia le proporcionan un mapa de calor para la innovación. En lugar de estudiar las ofertas de los competidores para encontrar una ligera mejora incremental, concéntrese en atender la brecha de las necesidades de los clientes. Es un camino hacia soluciones totalmente nuevas y muy diferentes.
Encontrar la brecha también funciona dentro de su organización. Atacar los puntos débiles internos le ayuda a fortificar su empresa contra las nuevas amenazas de la competencia. Cuanto antes se preste atención a esas lagunas, menos doloroso será el remedio y más productivo el resultado.
Las relaciones son otro ámbito en el que prestar atención a las lagunas puede ayudar. Tanto las relaciones personales como las profesionales pueden caer en patrones predecibles, con puntos ciegos que pueden crecer geométricamente y causar graves daños. Tomarse una pausa para prestar atención a la brecha y explorar las áreas que faltan puede ayudar a evitar mucho dolor, desde el bajo rendimiento hasta la disfunción.
En los negocios de hoy en día, tendemos a centrarnos en atacar los problemas vivos cuando surgen. También nos centramos en lo que ya existe, sólo para hacer pequeños retoques. En su lugar, siga el ejemplo de nuestros amigos del otro lado del charco y preste atención a la brecha. Busque áreas ocultas de promesas incumplidas, necesidades de los clientes e información faltante. Aunque las lagunas no están pidiendo a gritos que se les preste atención, pueden ser un manantial de oportunidades y, si llega a ellas primero, pueden ayudarle a adelantarse a la competencia.
Déjese guiar por este mantra hacia nuevas ideas, oportunidades e inspiración. Cuidado con la brecha. Órdenes de la Reina.