El hombre que secuestró a la adolescente de Wisconsin Jayme Closs y mató a sus padres se peleó en una prisión de Nuevo México con un recluso que preguntó por el caso, mostrando cómo se ha extendido la noticia de sus crímenes y planteando preguntas sobre si trasladarlo a una cárcel de otro estado logró algo.
Un juez de Wisconsin condenó a Jake Patterson a cadena perpetua en mayo por disparar a James y Denise Closs en su casa a las afueras de Barron en octubre de 2018 y secuestrar a su hija, Jayme. Ella tenía 13 años en ese momento.
Patterson la obligó a vivir bajo una cama en su cabaña del norte de Wisconsin durante 88 días antes de que ella escapara y la policía lo capturara.
Los funcionarios de la prisión de Wisconsin transfirieron discretamente a Patterson a Nuevo México en julio. Nunca ofrecieron una explicación y se negaron a decir dónde estaba recluido en ese estado.
El diario Green Bay Press Gazette informó que Patterson fue sancionado en la Institución Correccional Dodge de Waupun el 17 de junio, aproximadamente un mes antes de ser llevado a Nuevo México, por amenazar con agredir a otro recluso.
Los registros que el periódico obtuvo del Departamento Correccional de Nuevo México muestran que dos reclusos de una prisión no identificada de ese estado se acercaron a Patterson el 28 de agosto y le dijeron que abandonara la celda por su caso «relacionado con una niña de 14 años».
Patterson dijo que hablaría con quien quisiera que se fuera, pero uno de los reclusos le dijo a Patterson que no lo «probara». La videovigilancia muestra que el otro recluso se enfadó y adoptó un «enfoque agresivo» hacia Patterson, que dio un puñetazo a uno de ellos. Intercambiaron golpes y forcejearon hasta que un empleado de la prisión disparó una bolsa de frijoles que impactó en una barandilla. Se llevó a cabo una investigación, pero los resultados no están claros, informó el periódico.
Los registros también muestran que el equipo que trasladó a Patterson tuvo que conducir directamente desde Wisconsin a Nuevo México porque ningún otro estado quiso asumir la responsabilidad de Patterson mientras el equipo descansaba.
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Los incidentes plantean preguntas sobre si cualquier prisión puede ocultar los detalles de los crímenes de Patterson. Los funcionarios del Departamento Correccional de Wisconsin no respondieron a un correo electrónico en el que se les preguntaba si la agencia esperaba que su pasado no fuera descubierto.
El periódico también informó de que Patterson mintió a los funcionarios de un centro de recepción del sistema penitenciario de Nuevo México en Las Lunas sobre su caso, diciendo que conoció a una chica de 17 años por Internet, desarrolló una relación con ella y la ayudó a huir de casa.
Según una denuncia penal, Patterson dijo a los investigadores que no conocía a Jayme antes de secuestrarla y que simplemente la vio subir al autobús escolar un día y decidió llevársela. Entró en la casa de su familia con una escopeta, mató a sus padres, la arrastró fuera de la casa junto a sus cuerpos, la metió en el maletero de su coche y se marchó.