CoolSculpting está en auge – y por qué no iba a estarlo, teniendo en cuenta que este procedimiento rápido y no invasivo es capaz de congelar las células grasas rebeldes, ofreciendo resultados sorprendentes en las zonas más rebeldes. El resultado es evidente en unas pocas semanas, y se puede esperar una reducción de hasta el 25% del volumen del tejido graso en las regiones del cuerpo tratadas.

Aunque CoolSculpting ofrece resultados, lo que está respaldado por la ciencia, muchos clientes potenciales curiosos siguen sin decidirse a probar este tratamiento bastante caro. Y ni siquiera se trata de las posibles complicaciones; después de todo, cualquier procedimiento cosmético las tiene, y punto. La preocupación que se plantea con más frecuencia es la siguiente: ¿son los resultados de CoolSculpting realmente permanentes?

Entender cómo funciona la «congelación de la grasa»

Para entender si la criopolisis, también conocida como CoolSculpting y «congelación de la grasa», puede ofrecer resultados permanentes, es importante entender cómo funciona el procedimiento. A diferencia de los procedimientos invasivos como la liposucción, la criopolisis no destruye físicamente la grasa ni los tejidos circundantes, lo que puede ser muy traumático. En su lugar, las células grasas se exponen selectivamente a bajas temperaturas, lo que hace que mueran – sin embargo, los tejidos circundantes permanecen intactos.

Después de eso, el sistema inmunológico del cuerpo detecta las células grasas muertas y las elimina como cualquier otro residuo y subproducto del metabolismo. En otras palabras, las células grasas tratadas acaban siendo eliminadas del cuerpo. Como a partir de cierta edad ya no producimos demasiadas células grasas nuevas, las tratadas por CoolSculpting y eliminadas con éxito no pueden ser sustituidas.

¿Así que el debate sobre la permanencia está resuelto? Técnicamente, sí. Sin embargo, hay algunas complejidades prácticas que vale la pena considerar.

El «congelamiento» de las células grasas no elimina toda la grasa de la zona

Como se mencionó anteriormente, CoolSculpting promueve una reducción de hasta el 25% del tejido graso en la zona tratada. Además, se pueden realizar (y a menudo se realizan) tratamientos repetidos para congelar tantas células grasas como sea posible, logrando resultados óptimos.

Sin embargo, el método no puede garantizar nunca la eliminación del 100% del tejido graso de la zona, y aquí es donde radica un posible problema. Al igual que cualquier otra célula de grasa, las células de grasa que quedan después de un procedimiento conservan su capacidad normal de encogerse y expandirse dependiendo de la cantidad de energía que están almacenando en su interior. Siempre que su peso sea estable y su estilo de vida no cambie después del número deseado de sesiones de «congelación de grasa», esto no debería ser un problema.

Sin embargo, si empieza a consumir constantemente más energía de la que su cuerpo quema durante el día, ésta se almacenará en forma de grasa -incluso dentro de esas células grasas «dejadas atrás»- haciendo que el tejido graso se expanda. Con el tiempo, es posible volver a la apariencia anterior al procedimiento si se almacena suficiente energía excesiva.

¿Cuánto tiempo duran los resultados?

Teóricamente, los resultados deberían durar toda la vida – siempre y cuando se mantenga una buena salud y un régimen de nutrición de calidad a la vez que se hace suficiente ejercicio. Dado que la criolipólisis suele recomendarse a hombres y mujeres sanos que desean dar los «últimos retoques» a las zonas con depósitos de grasa persistentes, el cumplimiento de estos requisitos no debería ser un problema importante para estos pacientes.

‘Sin embargo, los profesionales inexpertos pueden recomendar a veces la «congelación de la grasa» a personas que estarían mucho mejor controlando su peso con medidas más convencionales, como la dieta y el ejercicio, antes de proceder a las fases finales de la escultura corporal. Si no está seguro de que CoolSculpting sea para usted, siempre es mejor buscar una segunda opinión antes de comprometerse con un plan de tratamiento costoso. Al fin y al cabo, quizá sea mejor que empiece a caminar a paso ligero con regularidad y a reducir el azúcar de su café.

¿Soy un buen candidato para la «congelación de grasa»?

Para reiterar el punto anterior, las personas que obtienen los mejores y más duraderos resultados de CoolSculpting suelen cumplir los siguientes criterios:

  • No importa su sexo: se ha demostrado que la «congelación de la grasa» funciona igual de bien tanto en hombres como en mujeres
  • Tiene brotes persistentes de tejido graso en zonas localizadas, como la barbilla, la parte superior de los brazos, la parte interior de los muslos, el abdomen o los flancos. CoolSculpting es un procedimiento muy focalizado, y no hay forma de realizar una sesión de congelación de grasa en todo el cuerpo (al menos en la actualidad). A veces se pueden tratar varias zonas en una sola sesión y, sin duda, el procedimiento se puede repetir, pero no espere que todo se haga a la vez.
  • Se siente cómodo con la idea de someterse a procedimientos cosméticos para mejorar el cuerpo, ya que CoolSculpting es esencialmente eso. Piense en ello como algo parecido a las inyecciones para las arrugas o los tratamientos con láser: los riesgos son mínimos, pero existen, y tiene que aceptarlos.
  • Está dentro de los 10-15 kg de su peso corporal ideal (idealmente en el extremo inferior o incluso menos) y sólo almacena grasa en zonas bien definidas.

Nuestra conclusión

CoolSculpting elimina permanentemente las células grasas tratadas exponiéndolas a bajas temperaturas que las destruyen. Las células muertas son entonces excretadas por el cuerpo con todos los demás residuos. Como esas células no vuelven a aparecer, técnicamente la «congelación de la grasa» es un procedimiento permanente.

Sin embargo, los cambios drásticos en el estilo de vida y la composición corporal pueden promover la expansión de las células de grasa restantes, o incluso la generación de otras nuevas, devolviendo el aspecto general al punto de partida.

En conclusión, la «congelación de la grasa» es un procedimiento fantástico y muy eficaz, con efectos secundarios mínimos y sin tiempo de inactividad – sin embargo, no es una panacea, y se requiere el compromiso de un estilo de vida saludable para mantener los resultados.

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