Kristina Kockar nació el 26 de mayo de 1989 en Zrenjanin, Serbia, de madre Nadica Zveljković, que trabajaba como camarera. Tras graduarse en la Escuela de Gramática de Zrenjanin, Kija asistió a la Escuela de Hostelería de Belgrado. Antes de hacerse famosa, trabajó como azafata en Airpink, Air Serbia y Etihad Airways. El 26 de septiembre de 2016 se casó con el cantante y exconcursante de Pinkove Zvezde, Slobodan Radanović.
En noviembre de 2017, Kockar entró en el reality Zadruga, emitido por RTV Pink, como personalidad anónima después de que su marido la engañara en directo con otra concursante, Luna Đogani. Inmediatamente atrajo las simpatías y el apoyo de la audiencia y finalmente ganó el programa con el 55% de los votos del público el 20 de junio del año siguiente. El 7 de agosto de 2018 se informó de que Kija se había divorciado de Radanović.
Tras el programa, decidió dedicarse a la música con su single de debut «Ne vraćam se na staro», lanzado el 20 de julio de 2018. El vídeo musical oficial de la canción ha reunido cerca de treinta millones de visitas en YouTube. Además, en octubre de 2019, Kija publicó su autobiografía, titulada Moj potpis (Mi firma), en la que reflexionaba sobre su relación con Radanović y su paso por Zadruga. Aunque se convirtió en una de las mayores atracciones de la Feria del Libro de Belgrado, el libro tuvo una recepción polarizada en el público. Entre 2018 y 2019, también fue juez en dos programas de talentos emitidos en TV Pink, Pinkove Zvezde: All Talents y Pinkove Zvezdice: All Stars. En noviembre, Kockar fue declarada icono gay de 2018.