Las investigaciones demuestran que muchas personas con trastornos del espectro autista tienen problemas médicos subyacentes que con frecuencia no se diagnostican y pueden causar o exacerbar los síntomas del autismo.
Estas condiciones médicas incluyen el síndrome del cromosoma X frágil, alergias, asma, epilepsia, enfermedades intestinales, trastornos gastrointestinales/digestivos, deficiencias de vitaminas y minerales, sensibilidades alimentarias, infecciones víricas y fúngicas persistentes, PANDAS, trastornos de la alimentación, trastorno de ansiedad, trastorno bipolar, TDAH, síndrome de Tourette, TOC, disfunción de la integración sensorial, trastornos del sueño, trastornos inmunológicos, trastornos autoinmunes, disfunción mitocondrial y neuroinflamación. El tratamiento de estos problemas médicos subyacentes puede mejorar en gran medida algunos de los comportamientos y síntomas asociados al autismo.
Los pacientes deben someterse a pruebas de diagnóstico y consultar con un médico autorizado para desarrollar un plan de tratamiento individualizado.
La NAA recomienda encontrar un médico que no ignore las condiciones médicas subyacentes que puedan estar contribuyendo a los síntomas y a la gravedad del autismo. Hay un número de médicos en los Estados Unidos que se especializan en el tratamiento de niños y adultos con autismo. Por favor, visite http://medmaps.org para obtener información.
Para leer más sobre las comorbilidades médicas en el TEA, haga clic aquí para obtener un excelente documento de Treating Autism.