Ida Pavlichenko ha diseñado una importante mejora de los tubos para los oídos que los médicos utilizan para combatir las infecciones de oído que padecen muchos niños pequeños.
Los tubos que se utilizan actualmente atraen las biopelículas, lo que provoca más infecciones. Pavlichenko ha desarrollado un tubo más pequeño y resistente a las infecciones que ha demostrado ser seguro en pruebas con animales. Su sonda es selectiva en cuanto a los fluidos que deja pasar, de modo que la medicación puede administrarse, pero el agua de la ducha y la natación no entra.
Pavlichenko espera que la mejora de las sondas también conduzca a nuevos enfoques para tratar la pérdida de audición, que actualmente afecta a 450 millones de personas en todo el mundo. Se espera que esta cifra se duplique en las próximas tres décadas, a medida que la población envejece y la música emitida a través de los auriculares pasa factura.
Pavlichenko estaba embarazada cuando decidió investigar las infecciones del oído medio. Pero resolver el problema ha adquirido una nueva urgencia ahora que tiene un hijo y sabe lo que es ver al niño sufrir.
«Cuanto antes lleves a los niños a la guardería, antes experimentarás el terror de los resfriados y el interminable tratamiento con antibióticos», dice Pavlichenko, becaria del Instituto Wyss de Harvard y cofundadora de una startup llamada PionEar. Señala que a algunos niños hay que implantarles los tubos actuales varias veces para acabar con el ciclo de dolorosas infecciones, antibióticos y retrasos en el habla.
No sólo pueden infectarse los propios tubos, sino que pueden caerse o atascarse cuando tienen que salir. Implantarlos requiere anestesia general, a veces más de una vez.
En los adultos, los problemas de oído pueden ser aún más difíciles, porque los tubos pueden no permanecer en su sitio el tiempo suficiente y la medicación es difícil de administrar en el interior de un oído adulto. Los tubos de Pavlichenko abordan todos estos problemas y son más eficaces, se ajustan mejor y tienen menos probabilidades de provocar daños, afirma.