La N-acetil L-cisteína (NAC) ayuda a reponer el glutatión intracelular, un antioxidante celular vital.* La NAC tiene un bajo peso molecular y se absorbe bien por vía oral. La NAC es un precursor del glutatión que se ha utilizado en las prácticas terapéuticas durante varias décadas.1,2,3 Se ha utilizado durante mucho tiempo para apoyar la producción de mucosa saludable en un subgrupo de pacientes y para apoyar la función del hígado.*1,2 Más recientemente, los estudios clínicos han informado sobre el uso de la NAC como un eliminador de radicales libres, sobre todo cuando parece haber una necesidad de reposición de glutatión.*1,2 Al igual que con la investigación científica, la evidencia se desarrolla en ambos lados de una hipótesis. Esto es a menudo similar a los pesos incrementales que se añaden a cada lado de una balanza mecánica. Por ello, a veces nos referimos al «peso de la evidencia» cuando concluimos lo que la mayoría de los artículos y opiniones científicas es actualmente. La NAC no es diferente. Cada vez hay más pruebas que apoyan su papel en los niveles saludables de glutatión*, pero no todos los investigadores han llegado a la misma conclusión.

En un pequeño estudio (n=6), los autores concluyeron que la N-acetilcisteína no consiguió reducir la oxidación de las lipoproteínas de baja densidad en sujetos sanos.*4 La NAC se administró a los participantes por vía oral en una dosis de 1,2 gramos al día durante 4 semanas, seguida de 2,4 gramos al día durante 2 semanas.4 La NAC no sólo no tuvo ningún efecto sobre la susceptibilidad de las LDL a la oxidación, sino que se redujo la concentración de glutatión en sangre total en los sujetos que la consumieron y aumentó la concentración de glutatión oxidado, lo que sugiere que la NAC actúa como un prooxidante en la dosis utilizada.*4

A pesar de la amplia evidencia que apoya que las bajas concentraciones de glutatión conducen a un aumento de la oxidación de las lipoproteínas y el papel de la NAC en los niveles saludables de glutatión,* este estudio no apoyó la supuesta acción de la NAC.2,4 Dado que los resultados no coinciden necesariamente con los conocimientos actuales, es importante seguir evaluando la metodología. El estudio utilizó sujetos sanos y normolipidémicos y no proporcionó ninguna otra información sobre los criterios de inclusión o exclusión utilizados para seleccionar a los participantes. Debido al pequeño tamaño de la muestra, los resultados no son generalizables. Además, el estudio no tuvo en cuenta ninguna variable cofundadora que pudiera haber afectado a los resultados del estudio. Por ejemplo, sólo se midió el glutatión en sangre total, por lo que no se puede determinar la relación entre los niveles plasmáticos y las concentraciones eritrocitarias. Es importante señalar que el glutatión es más un sistema que un nivel concreto. El cuerpo utiliza diferentes estados oxidativos y reductores en diferentes situaciones. Cuando la disponibilidad del glutatión celular es reducida, la desintoxicación de los metabolitos del oxígeno, como el superóxido, el peróxido de hidrógeno y los radicales hidroxilo, está limitada. Dado que la NAC es un agente rico en tioles, tiene el potencial de interactuar con ciertas especies oxidativas reactivas y formar estos mismos metabolitos de oxígeno.

Una teoría sobre los posibles efectos contradictorios de la NAC puede ser que los compuestos eliminadores de radicales libres de un solo agente pueden ejercer estrés oxidativo. Esto se ha visto en relación con el betacaroteno, la vitamina E y la vitamina C.5,6,7 En esta pequeña muestra, se puede razonar que la NAC rica en tioles se administró en una dosis innecesariamente alta. Aquí es donde la metodología se vuelve interesante. Los investigadores informaron de que no habían observado ningún cambio en el único marcador oxidativo de las LDL oxidadas después de 4 semanas utilizando 1200 mg diarios, por lo que duplicaron la dosis. Sin embargo, no se informó de los niveles de glutatión y no está claro si se midió. El lector tiene que preguntarse si los niveles de glutatión ya estaban reducidos utilizando esta dosis o si la reducción de los niveles de glutatión en sangre sólo se observó después de la dosis grande. Conocer esta información sería clínicamente útil a pesar del pequeño tamaño de la muestra. Además, la evaluación de un solo marcador está bien para un estudio aislado, pero no es tan valioso desde el punto de vista clínico.

Los resultados de estudios más recientes encontraron resultados contradictorios con respecto al uso de la NAC. Un estudio revisó más de 100 artículos y descubrió que la actividad de eliminación de radicales libres de la NAC puede atribuirse a su rápida reacción con los radicales libres, así como a la restitución del glutatión reducido.*2 Otro estudio descubrió que la NAC aumenta los niveles de glutatión dentro de las plaquetas y disminuye las especies reactivas del oxígeno in vitro.*2 En otro estudio se observó que la NAC era más eficaz para reducir la conjugación plaqueta-monocito en los pacientes con el glutatión plaquetario más agotado y los pacientes con plaquetas llenas de glutatión al inicio no recibieron ningún beneficio del tratamiento con NAC y no experimentaron un aumento del glutatión plaquetario.*2 Las concentraciones plasmáticas de glutatión alcanzan su máximo en las seis horas siguientes a la administración.8

El uso empírico de la N-acetil L-cisteína (NAC) suele ser una titulación. La dosis se aumenta hasta que se identifica un efecto y luego se reduce. El exceso de NAC produce flatulencia maloliente y los médicos suelen reducir la dosis para anular este efecto. Esto permite individualizar la atención. La NAC también se utiliza empíricamente junto con otros micronutrientes para apoyar todo el sistema de glutatión en lugar de proporcionar sólo materiales precursores.

  1. Lasram MM, Dhouib IB, Annabi A, El Fazaa S, Gharbi N. A review on the possible molecular mechanism of action of N-acetylcysteine…. Clin Biochem. 2015 Nov;48(16-17):1200-8.
  2. Rushworth GF, Megson IL. Usos terapéuticos existentes y potenciales de la N-acetilcisteína: La necesidad de la conversión a glutatión intracelular para los beneficios antioxidantes. Pharmacol Ther. 2014 Feb;141(2):150-9..
  3. Elbini Dhouib I, Jallouli M, Annabi A, et al. A minireview on N-acetylcysteine… Life Sci. 2016 Mar 2. pii: S0024-3205(16)30152-7.
  4. Kleinveld HA, Demacker PNM, Stalenhoef AFH. Fracaso de la N-acetilcisteína para reducir la oxidabilidad de las lipoproteínas de baja densidad en sujetos sanos. Eur J Clin Pharmacol. 1992;43(6):639-42.
  5. Palozza P, Serini S, Di Nicuolo F, Piccioni E, Calviello G. Prooxidant effects of beta-carotene in cultured cells. Mol Aspects Med. 2003 Dec;24(6):353-62.
  6. Kontush A, Finckh B, Karten B, Kohlschütter A, Beisiegel U. Antioxidant and prooxidant activity of alpha-tocopherol in human plasma and low density lipoprotein. J Lipid Res. 1996 Jul;37(7):1436-48.
  7. Carr A, Frei B. ¿Actúa la vitamina C como prooxidante en condiciones fisiológicas? FASEB J. 1999 Jun;13(9):1007-24.
  8. Bridgeman, MME, Marsden M, MacNee W, Flenley DC, Ryle AP. Cysteine and glutathione concentrations in plasma and bronchoalveolar lavage fluid after treatment with N-acetylcysteine. Thorax. 1991 46;39-42.

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