Entender cómo el cambio climático afectará a la fenología de las plantas (cambios en el momento de la actividad de las plantas) es fundamental para muchos estudios ecológicos y biogeoquímicos. Este aspecto de la ecología vegetal a menudo se ha pasado por alto, pero abordar las consecuencias del cambio climático para la gestión adaptativa/mitigativa es ahora una de las prioridades de los organismos de financiación. Este estudio es innovador porque utiliza los días de grado de crecimiento (GDD), que existen desde la década de 1730, como un indicador del ecosistema para estudiar el cambio de las temperaturas diurnas; sus efectos en las diferentes etapas de crecimiento de las plantas en el último siglo; y como base para el desarrollo de futuras estrategias de gestión adaptativa. Nuestros resultados muestran que el período de tiempo más reciente (1980-2009) tuvo la emergencia más temprana y la menor variabilidad entre estaciones en el día en que se produjo la etapa de cultivo para la mayoría de las etapas, excepto la emergencia y la madurez fisiológica. Las tendencias lineales de 100 años en las estaciones indicaron que las siete etapas del cultivo, excepto la iniciación de la borla, se adelantaron un día por década durante el periodo de estudio. El número de estaciones con disminuciones significativas varió de 11 a 17 estaciones de un total de 23 estaciones en Kansas. La etapa de iniciación de la borla se produjo más tarde en un día por década durante el período de estudio. El período más reciente (1980-2009) tuvo la mayor variabilidad entre las estaciones y los períodos de 30 años. La variabilidad de las tendencias es mayor en el oeste de Kansas en comparación con el este. Este conocimiento tiene un potencial transformador para mejorar nuestra comprensión de la ocurrencia y la duración de las diferentes etapas de crecimiento de las plantas, añadir precisión local a los hallazgos anteriores para los cambios en la GDD general que abarcaban áreas más grandes, y ayudar a explicar las diferencias en las tendencias de algunos estudios anteriores. Estos cambios en la fenología de las plantas agrícolas como resultado del cambio climático tienen implicaciones en el aumento de la producción de alimentos necesario para alimentar a la creciente población.