La cafeína es la droga más popular del mundo, pero a menudo se nos dice que debemos evitar tomar demasiado.

Una de las razones por las que algunos intentamos limitar la cantidad de café o té que tomamos es que hemos oído que puede ser deshidratante porque es un diurético.

Un diurético es una sustancia que hace que el cuerpo produzca orina, y se ha sugerido que la cafeína puede hacer esto porque aumenta el flujo de sangre a través de los riñones.

Pero si usted disfruta regularmente de unas cuantas tazas de café o té al día, la cantidad moderada de cafeína que contienen no le hará perder más líquido del que ingiere, dice la dietista y nutricionista Lisa Renn.

Tampoco es probable que tu taza de café te haga ir al baño más que cualquier otra bebida.

«Hay pruebas de que la cafeína en cantidades elevadas actúa como diurético en algunas personas, pero su consumo moderado no es en realidad tan significativo», afirma.

Un estudio realizado en 2014 en el Reino Unido sobre hombres que bebían café con regularidad no encontró diferencias en los niveles de hidratación entre los que tomaban cuatro tazas de café de 200 ml al día y los que bebían la misma cantidad de agua.

Los investigadores midieron la producción de orina de los hombres durante un período de 24 horas junto con otros marcadores de hidratación en su sangre, y concluyeron que el consumo moderado de café proporcionaba cualidades hidratantes similares a las del agua.

Aunque el estudio se centró en la ingesta de café, los que beben té también pueden animarse con los resultados, ya que el té contiene cantidades de cafeína similares a las del café.

Cabe destacar que este estudio analizó a hombres que bebían café con regularidad. Hay algunos indicios de que el café puede tener un mayor efecto diurético en aquellos que no beben normalmente café porque no han desarrollado una tolerancia a la cafeína.

Sin embargo, hasta ahora las pruebas en torno a esto no están del todo claras.

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Cómo afecta la cafeína a la hidratación

Si tomas café con regularidad y no lo bebes en exceso, no debería deshidratarte.

Una de las razones por las que las bebidas que contienen cafeína -el café, el té, los refrescos de cola y las bebidas energéticas- han tenido tan mala fama a lo largo de los años es porque la cafeína es un diurético cuando se consume en grandes dosis de más de 500 mg.

Los diuréticos hacen que el cuerpo produzca más orina, lo que significa que se pierde sodio y agua.

Cuando se pierde demasiado sodio y agua, uno se deshidrata, y esto puede afectar a una serie de funciones corporales, desde el control de la temperatura hasta la absorción de los alimentos.

Sin embargo, es poco probable que la cantidad de cafeína que se consume en una taza tenga estos efectos y, de hecho, puede contribuir a la ingesta diaria de líquidos.

El cuerpo de los hombres necesita unos 2,6 litros y el de las mujeres unos 2,1 litros de agua al día, que pueden obtenerse de una serie de alimentos y bebidas distintos del agua, como el café y el té.

«Ciertamente, se pueden intercalar cafés y aguas a lo largo del día, por lo que se puede llevar una botella de agua y beberla a sorbos la mayor parte del tiempo, y luego tomar un café en los descansos», dice la Sra. Renn.