Casi todo el mundo experimenta dolor de talón al menos una vez. El dolor de talón puede no indicar una condición seria, pero ciertamente interfiere con sus actividades normales como el ejercicio e incluso caminar. He aquí algunas preguntas frecuentes que nos hacen en nuestra consulta sobre esta dolencia tan común:
¿Qué causa el dolor de talón? Una de las causas más frecuentes del dolor de talón es la fascitis plantar, o inflamación de la banda gruesa de tejido que recorre la parte inferior del pie desde el talón hasta los huesos de los dedos. La fascitis plantar afecta hasta al 10% de la población. Otras causas comunes de dolor de talón incluyen un problema biomecánico como la altura del arco, el estrés o el impacto repetido del talón, o la tendinitis de Aquiles. La artritis o la bursitis también pueden contribuir al dolor de talón.
¿Por qué me duele más el talón cuando me levanto por la mañana? El ligamento de la fascia plantar en la parte inferior de su pie se contrae mientras descansa. Estar de pie provoca un repentino y doloroso estiramiento y tirón del ligamento.
¿Quién tiene más riesgo de sufrir dolor de talón? Las mujeres padecen fascitis plantar con más frecuencia que los hombres, quizás debido a la mala elección del calzado, como los tacones altos. Las personas con sobrepeso o que permanecen de pie durante varias horas al día, los individuos con pies planos o con un arco muy alto, así como los que llevan zapatos desgastados con suelas finas tienen un mayor riesgo de sufrir dolor de talón.
¿Qué tipo de tratamiento hay para el dolor de talón? Si usted sufre de dolor de talón, por favor venga a visitarnos para un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento que funcione mejor para usted. Algunos de nuestros tratamientos incluyen medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), para reducir la inflamación; una inyección de esteroides para aliviar tanto el dolor como la inflamación; reposo y aplicación de hielo en la zona dolorida; fisioterapia para ejercicios de estiramiento y fortalecimiento y masaje. Si el dolor persiste, podemos recomendar tratamientos más intensos e incluso la cirugía.
¿Se puede prevenir el dolor de talón? Algunos cambios en el estilo de vida pueden ayudar a que la fascitis plantar no vuelva a aparecer. Si tiene sobrepeso, pierda peso para reducir la presión sobre sus pies. Evite el uso de tacones altos; en su lugar, elija zapatos resistentes con buena sujeción. Realice ejercicios de bajo impacto, como la natación o el ciclismo, en lugar de correr. Estire las pantorrillas y la planta de los pies con frecuencia. Incluso durmiendo con las sábanas desabrochadas podrá estirar los pies por la noche.
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