Nicolas Massu no tiene dudas; Dominic Thiem, al que entrena desde hace casi un año, está preparado para el reto de enfrentarse a Rafael Nadal en el Open de Australia.
El encuentro tendrá lugar el miércoles por la noche en la Rod Laver Arena, mientras ambos intentan reservar su lugar en las semifinales del primer Grand Slam del año.
Durante la preparación, Massu se sentó con ATPTour.com para hablar de su tiempo en el palco del número 5 del mundo.
¿Cómo fue la pretemporada?
Tuvo una buena pretemporada. Veintiún días en Miami y casi dos semanas en la Costa de Oro. En Miami trabajamos mucho en la preparación física. Es una ciudad muy buena para la pretemporada por el clima en esa época del año, y además había muchos jugadores. Luego, en la Costa de Oro, hicimos más hincapié en el tenis.
Los dos jugadores que elegimos para la pretemporada eran muy buenos. Llegamos a Australia el 20 de diciembre, hemos estado aquí durante cinco o seis semanas. Dominic quería hacerlo así esta temporada y ha sido bueno hasta ahora.
Como jugador, siempre intentas estar motivado. Obviamente, tiene la capacidad de trabajar muy duro. Siempre quiere mejorar y siempre está dispuesto a hacerlo. Los que le rodeamos, su equipo y su familia, intentamos ayudarle. Lo importante es que Dominic tiene ganas y escucha, que es la clave.
Desde fuera parece que os lleváis muy bien.
Venimos de culturas diferentes y tenemos nacionalidades distintas, pero nos entendemos muy bien. Cuando los resultados son positivos todo es más fácil, pero lo más importante es creer en el trabajo que estás haciendo.
Estoy aquí para ayudarle, y me hace mucha ilusión hacerlo también. Me gustaba la presión como jugador y ahora me gusta la adrenalina de ser entrenador, por eso he empezado esta nueva etapa . Son sensaciones que sólo se consiguen con el deporte. He tenido las dos facetas, como jugador y como entrenador, y las disfruto por igual.
¿Por qué congeniáis los dos?
Tenemos edades similares. He jugado con muchos de los jugadores que hoy siguen en el Tour. Tengo una visión actualizada del tenis y trato de transmitirle mi experiencia. Sí que tienes que conocer al jugador al que entrenas. Yo tenía un estilo de tenis y Dominic tiene otro, pero al final los dos estamos motivados para seguir haciendo grandes cosas, él como jugador y yo como entrenador.
Compartimos mucho tiempo juntos y no sólo en la pista. Nos conocimos en el torneo de Buenos Aires y desde ahí prácticamente hemos estado juntos todo el tiempo. Por suerte, hemos tenido una muy buena relación en términos de respeto y también vemos el tenis de una manera similar.
Carlos Moyà dijo el otro día que «a la hora de hablar con un jugador profesional, es muy importante encontrar el momento adecuado»
Como fui jugador, y estuve tantos años en el Tour, aprendí mucho sobre cómo manejar esos espacios. Con Thiem, trato de manejarlo así: a veces estoy más encima de él, a veces tengo más distancia. Lo mismo en los partidos, estar más comunicativo y eufórico o más tranquilo. Eso se consigue con todos los años en el Tour. También depende de la personalidad del jugador.
En cualquier caso, él es la persona importante y es algo vital que tienes que entender. Cuando eres jugador, todo gira en torno a ti. Ahora, cuando terminas esa etapa, y por ejemplo te conviertes en entrenador, tienes que aceptar ese papel. He aprendido que la persona principal es el jugador.
Así que estás de acuerdo con la importancia de la comunicación.
Llevo casi un año con él y ahora nos conocemos mucho mejor. Se necesita ese periodo de conocerse para entender un poco las cosas. Los resultados ayudan, por supuesto. Ganar Indian Wells cuando llevábamos tres semanas juntos es una forma de confirmar que estamos haciendo las cosas bien, pero no siempre tienes resultados positivos.
Hay que tener la claridad mental para saber que hay triunfos, pero también derrotas. La carrera de un tenista es muy larga. Ahora conozco mejor a Thiem, tengo una idea más clara de cuándo puedo hablar con él. Lo más importante es que sea una persona abierta al diálogo, muy respetuosa y con mucha humildad. Estoy contento por lo gran jugador que es, pero sobre todo por su forma de ser como persona.
¿Es hora de dejar de encasillarlo como jugador de tierra batida?
Cuando empecé a jugar, también lo hice en arcilla porque en Chile no tenemos canchas duras ni cubiertas. Crecí en arcilla y fui muy consistente en esa superficie durante toda mi carrera, pero mis mayores resultados fueron en canchas rápidas.
Antes de ser su entrenador, también vi a Thiem y me encantó cómo jugaba. Estaba convencido de que podía jugar igual de bien en cualquier superficie porque el tiempo te da más experiencia y entiendes mejor el tenis. Los pequeños detalles marcan una gran diferencia. Y una cosa está muy clara, conseguir un buen resultado te ayuda a creer que es posible.
Pero sus grandes resultados han sido en tierra batida.
Sus grandes resultados han sido en tierra batida, sí, pero si echamos la vista atrás podemos ver que perdió contra Nadal en los cuartos de final del US Open en un gran partido, ganó un título en hierba, ha ganado grandes partidos en pista dura… Creo que ganar Indian Wells fue muy importante para él porque fue su primer ATP Masters 1000 y eso le ayudó a ganar confianza para ganar otros títulos en pistas rápidas. Estuvo a punto de ganar las Nitto ATP Finals, ahora está en los cuartos de final del Open de Australia.
Y jugando muy bien.
Hay que darle crédito; tiene un talento espectacular, tiene unos tiros geniales, una potencia única y es extraordinariamente intenso en su trabajo. Es un tenista con muchas ganas y a una buena edad. Acaba de cumplir 26 años. Todavía es muy joven, pero al mismo tiempo lleva varios años en el Tour y tiene esa experiencia. Tiene un futuro muy importante por delante y, por supuesto, tiene la oportunidad de seguir haciendo cosas, pero lo más importante son esas ganas.
Entonces, ¿está preparado para ganar un Grand Slam?
Creo que puede ocurrir en cualquier momento, ahora o dentro de unos años. Hay otros jugadores que están en una situación similar, pero sé que Dominic trabaja para aprovechar al máximo esa oportunidad si llega el momento, como ocurrió conmigo en los Juegos Olímpicos. Siempre quise ganar algo importante; un Grand Slam, la Copa Davis, la medalla de oro, ser el número 1 del mundo…
Se me dieron algunas cosas y otras no, pero siempre me dije que si llegaba la oportunidad, tenía que estar preparado para aprovecharla al máximo, no esperar a que sucediera por casualidad. Y Dominic está en ese proceso; trabaja con la expectativa de que llegue ese momento para poder cogerlo con las dos manos.
Rafael Nadal le espera en cuartos de final. Hace dos años, en la misma ronda del US Open, el ganador se decidió en el tie-break del quinto set.
Analizo todo. Veo muchos vídeos y saco conclusiones de los entrenamientos. Todo el mundo se conoce en el Tour, aparte de cuando llega un jugador nuevo y tienes que sacar todo lo que puedas para tener esa ventaja. El partido del US Open es importante, pero fue hace casi dos años y han pasado cosas.
La temporada pasada se enfrentaron dos veces y el botín se repartió en Barcelona y en Roland Garros. Va a ser un reto importante. Cuando estás en los cuartos de final de un Grand Slam significa que estás en las rondas importantes y que todo puede pasar. Será un gran partido para los aficionados y también para ellos. Se llevan bien, se respetan mucho y normalmente tienen partidos increíbles.
¿Son los dos jugadores más intensos del ATP Tour?
Eso es lo que dice todo el mundo. Esos dos están entre los tres o cuatro jugadores más intensos, eso es seguro. Algún otro puede tener una intensidad similar, pero diferente a la vez porque su juego es un poco más libre.
Si hablamos de la intensidad con la que devuelve la bola… El otro día entrenaron en la Rod Laver Arena y ambos producían una velocidad de pelota espectacular, la forma en que la pelota viajaba de un lado a otro. Por eso cuando se enfrentan suelen producir grandes partidos, porque son muy sólidos.
¿Qué es lo que más te gusta de Nadal?
Siempre lo he dicho, Rafa es un ejemplo para todos los niños. Cualquiera que vea cómo se dedica al deporte, la pasión que pone, su mentalidad… Las nuevas generaciones entienden que el tenis no es sólo talento, también es trabajo duro. Me encanta lo grande que es en la pista, pero sobre todo fuera de ella.
Es un deportista con un legado espectacular. Y tiene una de las mejores cabezas de la historia del deporte mundial, luchando desde el primer punto hasta el último y dándolo todo. Sabemos que tendremos que darlo todo, Dominic lo tiene claro. Él también es un luchador, siempre quiere más, seguir empujando hacia adelante… por eso será un gran partido.