Las úlceras bucales, también conocidas como aftas, son pequeñas lesiones que son dolorosas y generalmente aparecen en la lengua o en los labios. Pueden tener varias causas, pero generalmente están relacionadas con la ingesta de alimentos muy ácidos. Por lo tanto, lo primero que debes hacer es dejar de comer este tipo de alimentos, especialmente frutas ácidas. Esto disminuirá la irritación y permitirá que tu boca se cure más rápido.

Sin embargo, también hay alimentos/productos que pueden ayudar a curar las aftas y que sueles tener en la alacena de tu casa. Consulta las cinco formas de curar las aftas más rápido:

5 maneras fáciles de deshacerse de las úlceras bucales más rápido

Aplica té negro

Aplica una bolsa de té negro sobre el afta, ya que el té negro contiene taninos, una sustancia astringente, que elimina los residuos y la suciedad. Para aplicar correctamente el té negro, hay que preparar el té colocando una bolsita en una taza de agua hirviendo y dejarla infusionar. Cuando ya no esté caliente, coloque la bolsita de té directamente sobre el afta.

Enjuague bucal con agua salada

Enjuagarse la boca con agua salada tibia ayuda a desinfectar el afta y a acelerar la curación porque la sal tiene un efecto bactericida, que elimina las bacterias de la región. Para hacer una solución de agua salada basta con añadir una cucharada de café de sal a una taza de agua tibia. Enjuáguese la boca con esta solución durante unos minutos, dos veces al día.

Masticar un clavo de olor

Masticar un clavo de olor también puede ayudar a curar el afta más rápidamente y aliviar el dolor en pocos minutos. Esto se debe a que el clavo de olor tiene propiedades antisépticas y analgésicas, lo que puede ayudar a mantener el afta limpia, a que se produzca la curación y a que se alivie el dolor en pocos minutos.

Hacer gárgaras de leche de magnesia

Hacer gárgaras de leche de magnesia permite recuperar la lesión y protegerla de las bacterias, por lo que esto también acelera el proceso de curación. Para preparar la solución para hacer gárgaras basta con mezclar una cucharada de leche de magnesia con una taza de agua.

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